Los dermatólogos están viendo un preocupante fenómeno en sus consultas: niñas y adolescentes, en su mayoría chicas, pero también algunos varones, que están utilizando cremas y productos para el cuidado facial inapropiados para su edad. Estos menores, a veces de tan solo 10 años, están siguiendo 'rutinas' adquiridas de influencers en redes sociales. Esta tendencia, conocida como 'cosmeticorexia', ha ganado fuerza tras la pandemia, convirtiéndose en un problema que preocupa a los especialistas y a los padres.

La jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Sant Joan de Déu, Eulàlia Baselga, señala que la 'cosmeticorexia' se ha propagado debido a la obsesión por la imagen y el culto al cuerpo, fomentados por las redes sociales. Esta adicción a los cosméticos antiedad está generando consultas que demuestran que el uso excesivo de estos productos está afectando la piel de los menores. Baselga advierte que algunos jóvenes están sufriendo problemas dermatológicos provocados por estas 'rutinas' de belleza inadecuadas.

Los especialistas alertan sobre la importancia de desenganchar a los menores de estas rutinas inapropiadas, ya que el uso excesivo de productos puede provocar afecciones como acné o irritaciones en la piel. A pesar de que las cremas no son inherentemente 'buenas o malas', señalan que una piel sana no requiere de tantos productos, siendo el protector solar el único realmente imprescindible. Además, el uso excesivo de cosméticos puede agravar problemas dermatológicos preexistentes y, en algunos casos, generar alergias.

El aumento de estos casos preocupa enormemente a los especialistas, que ven en esta tendencia una esclavitud de los menores a los intereses de la industria cosmética. La presión por lucir joven y bello está llevando a adolescentes a utilizar productos innecesarios que, lejos de mejorar su aspecto, están generando problemas en su piel. La dermatóloga Anna López, del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, alerta que algunas pacientes sufren acné y otros problemas a causa de seguir tratamientos erróneos basados en recomendaciones inadecuadas vistas en las redes sociales.