Si la falta de tiempo es tu excusa para no practicar mindfulness, unos pocos minutos dedicados a la ducha diaria son suficientes para llevar a cabo un placentero ejercicio de meditación. La idea de meditar en la ducha, simultáneamente con la higiene diaria, ha sido promovida por expertos de Petit BamBou, referentes en meditación y mindfulness. Ludovic Dujardin, fundador de la aplicación líder en Europa, comparte claves para transformar este momento en una oportunidad para la calma y el bienestar.

El enfoque sencillo pero efectivo de la guía ilustrada 'Medita con Petit BamBou' busca hacer accesible la meditación a todos. A través de más de 80 ejercicios, se propone encontrar un momento y lugar para practicar la meditación de manera relajada. Según Dujardin, la meditación permite adquirir un estado de consciencia en el momento presente, reconectando la vida sin interpretaciones ni juicios.

Para meditar en la ducha, es importante estar consciente de las sensaciones y estar plenamente presente. Observar el agua que cae sobre el cuerpo, los olores y sonidos que acompañan la actividad, e incluso visualizar las pompas de jabón, son recomendaciones para iniciar esta práctica en un ambiente propicio.

Tras seguir estos pasos, se recomienda salir de la ducha lentamente, poniendo atención a las sensaciones, secar el cuerpo con calma, hidratar la piel sin pensamientos intrusivos, y continuar con la rutina diaria. Con la orientación de expertos y la disposición para dedicar unos minutos al día, la ducha diaria puede convertirse en un momento propicio para la meditación y la calma interior.