El abismo de la trata de personas y explotación sexual de menores en Bolivia

Familiares de víctimas denuncian la falta de investigación y pocas condenas

Bolivia

Tobias Jelskov - Unsplash

Compartir

Icono compartir
  • ONGs trabajan por rescatar a las víctimas.
  • Gobierno intenta fortalecer a los órganos policiales y judiciales.
Familiares de niñas y mujeres desaparecidas denuncian la falta de investigación de un crimen sin cuantificar y con muy pocas condenas, mientras que las ONG trabajan por rescatar a las víctimas y el Gobierno intenta fortalecer a los órganos policiales y judiciales. Un hombre trajeado. Un chico con gorra y pantalones cortos... hay todavía mucha más gente”, explica una trabajadora de la Fundación Munasim Kullakita (“quiérete hermanita”, en aymara), una organización boliviana que trabaja contra la trata de personas y la explotación sexual comercial de menores.
La prostitución ejercida voluntariamente por personas mayores de edad no es delito en Bolivia, pero sí lo es la actividad de quien prostituye a una tercera persona para lucrarse. Queen critica este concepto de “voluntariedad” porque obvia la vulnerabilidad de quien la ejerce y porque sirve, en la práctica, para ampararla.
Según las últimas cifras del Ministerio de Gobierno de Bolivia, en 2022 hubo 711 denuncias por delitos relacionados con la trata de personas y delitos conexos (pornografía, proxenetismo, tráfico de personas y violencia sexual comercial), en las que en el 23% las víctimas eran menores de edad.
Ricardo rescató a su hija de 16 años de un burdel de Santa Cruz, en una zona similar al distrito 12 de Octubre de El Alto, dos semanas después de su desaparición. Doña Lidia, sin embargo, no tuvo tanta suerte. Su hija Juliva salió de casa el 10 de julio de 2014, camino de la Universidad Pública de El Alto, donde cursaba el segundo año de Psicología. Nunca volvió.

últimas noticias