El Consell Executiu de Catalunya ha aprobado una normativa que prohíbe el uso de móviles personales por parte del alumnado de primaria dentro de las aulas, mientras que en secundaria se restringirá su utilización. Esta medida, derivada de las directrices del Consell Escolar de Catalunya (CEC), será implementada el próximo curso escolar. Asimismo, esta aprobación ha tenido lugar un día antes de que la consellera de Educació, Anna Simó, se reúna con autoridades ministeriales en Madrid para abordar regulaciones similares a nivel nacional.

La legislación catalana se alinea con otras comunidades autónomas que también están regulando el uso de dispositivos móviles en entornos educativos. Además, se destaca la inclusión de pautas para el uso de smartphones en los patios y comedores, extendiendo la restricción a todo el horario lectivo. Sin embargo, expertos señalan que el verdadero desafío se encuentra en el uso de pantallas en el ámbito familiar, más que en el educativo.

La normativa catalana tiene su origen en un extenso informe del Consell Escolar de Catalunya, el cual ha sido objeto de numerosos debates y discusiones en centros educativos y diferentes instancias del CEC. Asimismo, un 53% de colegios e institutos ya han implementado normativas similares durante el presente curso, sin esperar a las directrices oficiales.

La regulación del uso de móviles en centros educativos ha generado movilización ciudadana, con la creación del movimiento 'Adolescencia sin móvil', que busca retrasar la entrega del primer smartphone a niños y niñas. Por otro lado, la medida plantea interrogantes sobre la influencia de los dispositivos móviles en el ámbito educativo y la vida familiar, siendo objeto de debate entre expertos y asociaciones.